El exciclista colombiano reveló ante la Fiscalía que entregó $10 millones a un grupo armado tras ser extorsionado en 2016
Un giro inesperado en el caso Fusagasugá
Luis “Lucho” Herrera, ídolo del ciclismo colombiano, quedó en el ojo del huracán judicial al admitir ante la Fiscalía General de la Nación que pagó a paramilitares para que lo excluyeran de una investigación por la desaparición forzada de cuatro campesinos en 2002. La revelación, hecha durante su declaración voluntaria el pasado 5 de mayo de 2025 en el búnker de Bogotá, representa un vuelco inesperado en el caso que conmueve a Fusagasugá y al país entero.
“Yo les di el dinero en Fusa”
En su testimonio, Lucho Herrera confesó haber entregado 10 millones de pesos en 2016 a un presunto jefe de las Autodefensas del Casanare. Lo hizo en Fusagasugá, según sus propias palabras, tras ser contactado y amenazado por esta estructura criminal. La exigencia inicial fue de 7.000 millones de pesos, pero finalmente el exciclista pagó una suma mucho menor, supuestamente por miedo a ser vinculado falsamente a un crimen que —según él— nunca cometió.
Conocía a dos de los desaparecidos
En una parte de su declaración, Herrera reconoció que conocía a dos de los desaparecidos: Gonzalo Guerrero y Diuviceldo Torres, vecinos de su finca ubicada en la vereda San Rafael, en el sector rural de Fusagasugá. Esto contradice versiones anteriores, en las que había afirmado no tener relación alguna con los nombres señalados por desmovilizados.
No confesó participación directa
El exciclista colombiano no aceptó responsabilidad en las desapariciones, pero sí admitió haber recurrido al pago a una estructura criminal como mecanismo de autoprotección. Su relato ante la Fiscalía enfatiza que fue víctima de extorsión y chantaje, y que actuó por “temor a verse implicado injustamente en un hecho tan grave”.
Una versión escrita sin contrainterrogatorio
Durante la diligencia judicial, Herrera se presentó con su abogado, Hernando Benavides Morales, y entregó una declaración escrita. No enfrentó a los testigos ni ofreció testimonios verbales en sala, lo cual fue avalado por la normativa vigente. Su defensa aseguró que Herrera “actuó con transparencia y en respeto a la justicia”, y que no existe orden de captura vigente ni medida de aseguramiento en su contra.
No es sujeto procesal… por ahora
Según su abogado, Herrera no ha sido formalmente vinculado como imputado en el caso. Solo ha sido mencionado por personas condenadas o procesadas por delitos anteriores relacionados con paramilitarismo. Sin embargo, la Fiscalía continúa analizando los testimonios de exparamilitares y la nueva confesión del exciclista, que podría alterar el curso del proceso.
Fiscalía ya identificó a las víctimas
En junio de 2025, el ente investigador confirmó que al menos dos de los cuerpos hallados en fosas comunes pertenecen a los campesinos desaparecidos en la zona rural de Fusagasugá. La coincidencia entre los nombres mencionados por Herrera y los restos identificados agrava el contexto de su testimonio y podría tener consecuencias jurídicas posteriores.
Un pasado que persigue al ídolo
La figura de Lucho Herrera ha estado marcada por la admiración nacional, pero este episodio judicial ha sembrado dudas y controversias en torno a su legado deportivo y personal. Sus fanáticos y la opinión pública se debaten entre quienes lo siguen defendiendo como víctima de un montaje y quienes consideran que su silencio fue cómplice.
Denuncias desde 2023
Según investigaciones periodísticas, las amenazas contra Herrera comenzaron en 2016, pero desde 2023 ya existían alertas de que el exciclista podría ser mencionado en procesos de justicia transicional. Fue en abril de 2025 cuando un juez ordenó formalmente abrir investigación por desaparición forzada, tras escuchar declaraciones de exparamilitares acogidos a justicia ordinaria.
El silencio que inquieta
La familia de los desaparecidos ha exigido una verdad completa. En declaraciones a medios, algunos de sus miembros pidieron que Herrera diga todo lo que sabe y contribuya al esclarecimiento total de los hechos. “No nos importa si fue culpable o no. Queremos saber qué pasó con nuestros padres y hermanos”, declaró uno de los familiares en una entrevista con El País.
Herrera niega cualquier autoría
Durante toda su intervención ante la Fiscalía, Herrera reiteró que nunca ordenó ni participó directa o indirectamente en acciones violentas contra nadie. Su defensa insiste en que fue víctima de chantajes sistemáticos, que incluso llegaron a amenazar su vida y la de su familia si no entregaba dinero.
El país reacciona
En redes sociales, la noticia generó todo tipo de reacciones. Desde mensajes de respaldo hasta llamados a juicio penal inmediato, el nombre de Lucho Herrera volvió a acaparar titulares, esta vez por razones ajenas al ciclismo. Algunos lo comparan con otros casos de ídolos caídos por escándalos del pasado, mientras que otros defienden su honestidad y buena fe.
La Fiscalía no cierra el caso
El ente investigador anunció que la investigación continúa abierta y que evaluará todas las declaraciones, incluyendo la admisión del pago hecha por Herrera. Además, analizará si hay lugar para imputarle cargos por obstrucción a la justicia, encubrimiento o financiación de grupos armados ilegales.
¿Y si pagó por encubrir?
Una de las líneas de investigación que cobra fuerza es la posibilidad de que el pago de Herrera no haya sido para protegerse de una falsa acusación, sino para evitar ser delatado por un hecho del que sí tuvo conocimiento o participación. La Fiscalía buscará contrastar la información con otros testimonios y peritajes forenses en curso.
Impacto sobre su legado
El nombre de Herrera, que alguna vez se grabó con letras doradas en la historia del ciclismo latinoamericano, ahora aparece en los archivos judiciales junto a una de las investigaciones más sensibles del conflicto armado. La imagen del héroe del Tour del Avenir y la Vuelta a España ahora convive con la sombra de una investigación por desapariciones forzadas.
¿Se viene imputación?
Juristas consultados por medios colombianos estiman que, con la confesión del pago, la Fiscalía podría iniciar una imputación formal en los próximos meses, aunque aún no hay decisión definitiva. De darse, Herrera enfrentaría cargos graves que podrían afectar su reputación y sus derechos civiles.
El país espera justicia
Organizaciones de víctimas del conflicto han pedido que no se archive el caso y que se garantice la búsqueda total de la verdad, incluso si esto implica procesar a figuras reconocidas de la vida nacional. “El conflicto no debe tener intocables”, declaró un vocero del Movice.
Herrera dice estar tranquilo
Pese al revuelo mediático, Lucho Herrera afirmó en su declaración que se presentaba ante la justicia “con la tranquilidad de quien no tiene nada que ocultar”. El proceso, sin embargo, continúa en curso. Y el país sigue atento a cada paso.