La mano derecha del presidente dimite por discrepancias con el contrato de pasaportes

Ruptura por el contrato de pasaportes
La renuncia de Laura Sarabia como canciller de Colombia remece el corazón del gobierno de Gustavo Petro. La funcionaria, considerada su más cercana colaboradora, decidió apartarse del cargo este miércoles 3 de julio tras profundos desacuerdos con decisiones recientes, especialmente en torno al contrato de expedición de pasaportes. La salida de Sarabia, quien también ejercía como jefa de gabinete, revela una crisis interna que golpea el núcleo del poder en la Casa de Nariño.
Sarabia se aparta “por coherencia”
En su carta de renuncia, Laura Sarabia manifestó que no comparte “decisiones tomadas en los últimos días” y que su salida responde a un acto de coherencia personal e institucional. La decisión fue calificada como irreversible y tomada sin ánimo de generar conflicto, pero el mensaje fue claro: ya no se sentía cómoda ni respaldada en el gobierno.
Segundo canciller que cae por el mismo tema
Sarabia se convierte en la segunda canciller que renuncia por la polémica licitación de pasaportes. En enero de 2024, Álvaro Leyva fue suspendido e inhabilitado por el mismo motivo. Ahora, la insistencia del presidente en firmar con Portugal provoca la caída de otra ficha clave, generando un nuevo terremoto político.
Conflictos internos con figuras del petrismo
La tensión en la Casa de Nariño venía escalando desde hace semanas. Sarabia mantenía una relación tensa con personajes como Armando Benedetti y Alfredo Saade, quienes habían ganado terreno en el círculo presidencial. Los roces y diferencias en la toma de decisiones terminaron aislándola dentro del alto gobierno.
Una mujer de confianza que ya había caído
No es la primera vez que Laura Sarabia abandona el poder. En 2023 fue obligada a salir por el escándalo del polígrafo aplicado a su exniñera, pero volvió meses después reforzada. Su regreso fue visto como una muestra de poder e influencia, aunque esta segunda salida parece definitiva.
El presidente la desautoriza públicamente
Horas antes de la renuncia, el presidente Petro anunció públicamente que firmaría el contrato con Portugal, a pesar de la oposición técnica de la Cancillería. Esa declaración fue interpretada como una desautorización directa a Sarabia, dejándola sin margen de maniobra y empujándola hacia la dimisión.
El caso pasaportes se convierte en bomba política
La disputa por el contrato de pasaportes se ha convertido en un símbolo de la división dentro del gobierno. Mientras unos sectores defienden la transparencia y la continuidad, otros impulsan alianzas internacionales. La falta de consenso ha derivado en renuncias, sanciones e investigaciones.
Silencio en la Casa de Nariño tras la renuncia
Tras conocerse la dimisión, el Palacio Presidencial no emitió ningún comunicado oficial. La noticia fue confirmada por medios nacionales e internacionales, mientras desde el gobierno optaron por guardar silencio. La falta de reacción alimentó aún más la tensión.
La oposición critica improvisación del gobierno
Líderes de la oposición aprovecharon la renuncia para señalar improvisación y fracturas en el alto gobierno. “Otro funcionario clave que se va por falta de coherencia interna”, escribió en X un senador del Centro Democrático. Para muchos, la renuncia refleja una pérdida de control por parte del presidente.
¿Qué sigue para el Ministerio de Relaciones Exteriores?
La Cancillería queda nuevamente sin rumbo claro. En menos de dos años de mandato, Petro ha perdido dos cancilleres por la misma causa. Mientras tanto, crece la incertidumbre sobre quién será el próximo encargado de liderar la política exterior en un momento de tensión diplomática.
El pasaporte colombiano, epicentro de escándalos
Lo que debía ser un trámite administrativo se convirtió en una novela política. El contrato de pasaportes se ha transformado en una manzana de la discordia entre intereses, egos y decisiones de alto nivel. El tema ya ha provocado dos salidas y aún no se vislumbra un cierre definitivo.
Sarabia, símbolo de poder y caída
Laura Sarabia pasó de ser la funcionaria más poderosa del país a protagonizar una de las caídas más sonoras del gobierno. Su renuncia no solo es un golpe a la estructura de Petro, sino también un mensaje de advertencia sobre las grietas que se abren en su mandato.
Portugal, el nuevo socio en medio de la tormenta
La elección de la Casa de la Moneda de Portugal como socio estratégico no solo generó debate técnico, sino también tensiones diplomáticas. Algunos sectores cuestionan la falta de experiencia del nuevo aliado, mientras otros alertan sobre los posibles riesgos logísticos y legales.
Petro pierde otra ficha clave en año electoral
En pleno año preelectoral, el presidente pierde a una de sus principales aliadas. Sarabia no solo era canciller: también articulaba el discurso político, coordinaba decisiones de gabinete y controlaba información estratégica. Su salida deja un hueco difícil de llenar.
El gobierno niega crisis, pero el desgaste es evidente
Aunque el presidente no ha reconocido una crisis interna, la renuncia de Laura Sarabia deja claro que hay fracturas de fondo. Dos cancilleres renunciados, peleas internas, decisiones unilaterales y un gabinete inestable son señales de que el proyecto político de Petro enfrenta turbulencias.
Qué le decía Laura Sarabia a Petro en su carta de renuncia
En su misiva al presidente Gustavo Petro, Sarabia destacó que su decisión se basó en una “reflexión profunda” motivada por la responsabilidad que siente con su conciencia, con el país y con la forma en que entiende el ejercicio del poder público. Aseguró que “en los últimos días se han tomado decisiones que no comparto” y que, por coherencia personal e institucional, ya no podía continuar. En su carta reafirmó el afecto y respeto que le profesa a Petro, pero enfatizó que el rumbo actual del gobierno ya no era uno que ella pudiera ejecutar.
